Fue director de una de las películas más taquilleras del cine nacional, sus films se estudian como hitos en los institutos de artes visuales porque modificaron, con ternura y pocos recursos, el lenguaje para relatar la marginalidad y la injusticia social. Batió récords como cantautor romántico en todo el continente, con un repertorio que impregnó a varias generaciones. Fue, además, un ferviente peronista durante toda su vida: conoció a Perón y formó parte de la comitiva que lo trajo de regreso a Argentina. Un 28 de mayo nació Fuad Jorge Jury, más conocido por su nombre artístico: Leonardo Favio.
Tal vez para los más jóvenes sea un desconocido. Falleció hace más de diez años y el pico de su popularidad fue desde mediados de los 60 hasta el principio de los 90. Además, padeció una larga enfermedad que lo llevó a no producir mucho en sus últimos años. Como una especie de puente con las nuevas generaciones, la periodista Flor Halfon Laksman acaba de publicar “Favio Vigente: un recorrido por sus pasiones”, una reconstrucción de la vida y obra del ídolo popular, a través de sus distintas facetas. Nos comunicamos con la autora para que nos cuente sobre el libro, la investigación y cómo llegó Favio a su vida. “El libro tiene para mí dos objetivos muy pretenciosos. Uno tiene que ver con que los contemporáneos de Favio y el otro con las nuevas generaciones”.
– ¿Por qué Leonardo Favio?
– Porque es mi papá cantando en mi casa desde que soy muy chica y cantando en la calle incluso, cuando todavía sentía vergüenza por esas cosas. Ahora por suerte no y puedo reivindicar aquellos recuerdos. Pero bueno, para mí es un sonido muy hogareño, muy familiar, muy entrañable, y desde ahí me puse a pensar en todo lo que no conocía de él y me interesaba averiguar. Y a la vez en esa sensación de profunda familiaridad y popularidad que me interesaba muchísimo recorrer.
– Cuando empezaste tu investigación, teniendo en cuenta que tanto su vida como su obra fueron muy extensa y diversa, ¿cómo enfrentaste ese momento? ¿Dónde está la punta del ovillo?
– A mí me sirvió mucho pensar como punta del ovillo las pasiones de Favio, o lo que yo creo que fueron sus pasiones. Entonces me sirvió hacer cuatro capítulos. Por un lado, los afectos, en el sentido de que él en sus vínculos era muy amoroso y entonces todos lo recuerdan como muy atravesados por ese paso de Favio por sus vidas. Uno de música a donde fue un hit total y todavía lo es en Latinoamérica. El cine, donde todavía tiene las películas más taquilleras de la historia del cine argentino. Y la militancia donde tampoco pasó desapercibido, su militancia hizo que conociera a Perón en el exilio, que estuviera en el avión que trajo al General en su primer regreso y después en el regreso definitivo en aquel acto de Ezeiza.
– ¿Cómo fue ordenar todo ese bagaje de información después?
– Toda la información la fui reuniendo en estas cuatro partes: afectos, música, cine y militancia y es su historia contada cuatro veces. Es decir, si lees solamente la parte de afectos está su vida, pero fundamentalmente su vida atravesada por sus vínculos cercanos, su familia, sus amigos. Si lees solamente la de música lo mismo. Pero a mí me parece que va ayudando la de militancia que atraviesa mucho a todas y que de a poquito te va llevando a completar esa figura. Yo siento que si terminás de leer el libro tenés un perfil, una idea de lo que significó y significa Leonardo Favio en la historia argentina.
– En alguna entrevista te escuché decir que buscaste construir un puente generacional con los más jóvenes, traerle la figura de Favio a ellos. ¿Creés que haya elementos con las que estas nuevas generaciones puedan trazar un vínculo?
– El libro tiene para mí dos objetivos muy pretenciosos. Uno tiene que ver con que los contemporáneos de Favio, quizás recuerden algunas cosas de su propia historia y, a lo mejor, se enteren de cosas que hasta el momento no sabían. Y después, que mis contemporáneos o incluso las nuevas generaciones, sepan de esta figura tan relevante y se acerquen a su obra un poco, porque es una obra que al día de hoy se estudia en las escuelas de cine, es una música que al día de hoy suena en los países vecinos, en Colombia es súper popular. O sea, es un tipo que está completamente vigente y que algunos ni siquiera conocen.
– Si tuvieras que elegir tu faceta de Favio preferida ¿Cuál sería: músico, cineasta, militante?
– Mi faceta preferida inevitablemente es la que me impulsa a laburar esto que es la musical, pero no lo puedo pensar objetivamente porque estoy muy atravesada por lo que me genera a mí, que es ese sonido familiar, es mi papá cantando en mi casa. Es esa cosa de lo más popular, si bien en todos los ámbitos él ha sido muy popular, para mí la música llega a rincones, mucho más profundos de todo el país y toda la región.
– ¿Por qué Leonardo Favio nunca se convirtió en remera?
– Es una pregunta que nos hacemos como un modo de compararlo con la figura de Maradona por ejemplo, en el sentido de que hay pibes que no lo vieron jugar y que tienen puesta la camiseta. Diría que el libro se hace más preguntas y después desliza posibles respuestas y cada uno encontrará la suya.
Para quienes están interesados, “Favio Vigente: un recorrido por sus pasiones” se puede conseguir en distintas librerías de Córdoba, o a través de www.tienda.futurorock.fm, que cuenta con envíos a todo el país.